MONUMENTO a la MADRE UNIVERSAL

 

MONUMENTO a la MADRE UNIVERSAL


El 15 de octubre de 1950 se inauguró el Monumento a la Madre Universal del escultor marplatense José Alonso. Originalmente fue implantado en la esquina de Colón y San Luis con el rostro de la madre mirando hacia la salida del sol. Pero con la construcción de la cisterna subterránea el monumento se desplazó hasta su actual ubicación sobre la Av. Colón cerca de la calle Hipólito Yrigoyen, mirando hacia el norte.

Ubicación: Plaza Mitre, en la manzana rodeada por las calles Hipólito Yrigoyen, Brown, Mitre y la Av. Colón.


La idea del monumento a la madre surgió en el programa radial “El Club de Niños de Norma y Susana” (LU6 Emisora Atlántica), creación del docente Rouget Oscar Espinosa, cuyo personaje “Tío Enrique” se hizo muy popular y en el que trabajaba la locutora Tilde Uzquiano. Esta idea fue ganando voluntades y donaciones de la gente hasta que finalmente obtuvo el apoyo municipal.

Rufino Inda, intendente socialista, sugirió un concurso abierto a artistas locales y el material que debía utilizarse: la piedra Mar del Plata. El jurado del concurso estaba formado por Raúl Rubianes (escritor y crítico de arte del diario El Mundo de Buenos Aires), Fernán Félix de Amador (escritor, poeta y periodista) y Alfredo Guido (ilustrador y muralista).

Se presentaron 3 trabajos, de Manuel de Llano, José Alonso y Radogna. El primer premio fue para José Alonso y los otros dos recibieron menciones honoríficas.

Las tres obras (en escala) fueron puestas en exhibición durante un tiempo en un local situado al lado de la catedral.

El monumento fue realizado en el taller de José Alonso de Buenos Aires, en piedra Mar del Plata en dos bloques. La firma Sartora e Hijos se ofreció para recibirlo e implantarlo en el lugar. Junto a la obra se enterró una cápsula del tiempo que contenía diarios, dinero, monedas y elementos de la época, para abrirla al cumplirse 100 años desde la inauguración de la obra.